La poesía de Aridjis (1940) está marcada por la sensualidad y el dominio de la expresión. De Perséfone, André Peyre de Mandeiargues ha escrito: "éste es un nuevo Canto de Maldoror", de Mirándola dormir, dijo Octavio Paz: "en la poesía de Homero Aridjis hay una mirada, el pulso inconfundible de aquel que tiene necesidad de decir y que sabe que todo decir es imposible..."