ZEA, LEOPOLDO Y MARIO MAGALLÓN (COMPS.)
Como su nombre señala, el Mediterráneo fue, históricamente, un mediador, física y culturalmente, entre tierras y hombres; más tarde, su calidad mediadora se trasladó, con los conquistadores iberos, a tierras americanas; a diferencia de la colonización proveniente del mundo norteeuropeo agrupado en torno al Báltico, la que provino del Mediterráneo se mostró incluyente, ofreciendo así la clave de un mundo multicultural cada vez más necesario tras las grandes migraciones de la segunda mitad del siglo XX.